El objetivo de cualquier responsable de marketing es mejorar el branding y aumentar las conversiones o ventas. Si hablamos de marketing online, se trata de crear contenidos interesantes que atrapen a los usuarios y que consigan que realicen una acción: nos dejen su email o realicen una compra. Pero ¿qué contenido es el más adecuado? ¿qué tono el más interesante? ¿cuáles son las palabras que venden? A continuación te damos 8 claves que utilizamos en la agencia:
1. Tono positivo
El optimismo vende. Según Psychology Today, “las emociones positivas hacia una marca tienen más influencia en la fidelidad de los clientes” que otros juicios “basados en las características de la marca”.
Pero ser positivo no significa ser cursi. Se trata de lanzar mensajes claros, directos y que apelen a emociones positivas. El contenido debe ser sencillo -nadie puede mantenerse optimista si tiene que leer frases largas y difíciles-, vital -con palabras como “me gusta”, “sí”, “premio”, “interesante”, “solución”, “recompensa”, ….- y centrarse en la solución y no en el problema.
2. Enfoque personal
La mejor manera de ser personal es utilizar “tu” y “tus” en el texto. Se trata de hablar directamente al cliente para que el mensaje le llegue sin intermediarios.
3. Estilo directo
Un tono directo hará que los clientes entiendan que no tienes nada que ocultar y que tu contenido es fiable. Los textos directos son los que comunican claramente, sin artificios, frases subordinadas ni palabras rimbombantes. Como explica cualquier manual de periodismo: “claro, conciso y sencillo”.
4. Frases asertivas
El estilo asertivo está relacionado con una actitud enérgica y confiada. Se considera que una persona asertiva tiene un firme apretón de manos, mira a los ojos de su interlocutor, habla directamente y dice lo que quiere decir. Escribir de forma asertiva sería trasladar estas características a la escritura.
El mejor momento para ponerlo en práctica son los call-to-action.
5. Texto sugerente
El contenido debe ser sencillo, pero no aburrido. La intención es que el texto ayude a convertir lectores pasivos en fans convencidos. Para ello, lo mejor es:
- Utilizar verbos sugerentes, que muevan a la acción. Y, sobretodo, no usar frases pasivas, matan cualquier emoción.
- Las frases cortas son las más efectivas. Aportan ritmo y energía al texto.
- Cuidado con los signos de exclamación. Funcionan en algunos casos, pero pueden hacer que el contenido parezca forzado. Pueden usarse con moderación, ¡pero no más de uno por frase!
6. Actitud alentadora
Un poco de adulación no hace daño. A todos nos gusta sentirnos bien con nosotros mismos y decírselo al cliente -que tu producto o servicio le hará sentir mejor- ayuda a vender.
7. Cuidado con los datos
A menudo, desplegamos montañas de datos, gráficos y estadísticas para intentar convencer a los usuarios de lo increíble que es nuestro producto o servicio. Pero no siempre funcionan. Los datos son fríos y tienden a distanciar al lector. Por ello, deben utilizarse como herramienta de soporte, pero no como parte esencial del texto.
8. Preparados para la acción
Si un texto no hace actuar a los clientes, entonces es que no está funcionando. El objetivo de cualquier contenido es la acción -la compra-. Y esto es aplicable a cualquier texto y no solo a los call-to-action.
El cliente debe entender que es el momento de actuar. Por ello, es importante añadir en cada frase una explicación añadida. Por ejemplo: “Es el procesador más rápido del mercado, por lo tanto, podrás tener un millón de cosas hechas”. Las dos frases aportan información importante: “procesador rápido” y “cosas hechas”.
No olvides utilizar verbos de acción -”trabajar, producir, crear, conducir, ….”-. Estos verbos ayudan a cargar de contenido el texto y conducen al lector hacia la acción.